¡Sanando las heridas del pasado para transformar tu presente!
FASE 2
REPROGRAMACIÓN Y EMPODERAMIENTO
La Transformación Interior.
Semana 8
Despertando la abundancia Energía de Manifestación
Comprender que la abundancia es un estado de conciencia. Vamos a trabajarla como un flujo natural al que accedemos cuando sanamos nuestra vibración, reprogramamos creencias, y activamos el merecimiento desde la coherencia entre pensamiento, emoción y acción.
La abundancia es un latido. Un pulso interior que nace de un corazón alineado con el alma. No es algo que se posee, es algo que se expresa desde adentro hacia afuera.
Abundancia es cuando tu alma y tu cuerpo vibran en coherencia con la vida. Es sentir que eres suficiente, que ya eres completo, que mereces sin tener que luchar. Es vivir con confianza en que lo que necesitas llegará sin forzarlo, porque ya está en camino.
La abundancia es la energía de Dios/Universo expresándose a través de ti cuando estás alineado con tu propósito, con tu ser esencial.
Es permitirte recibir amor, apoyo, dinero, oportunidades, compañía, inspiración, y devolverlo al mundo en forma de servicio, belleza y verdad.
¿Y cómo se siente la abundancia en lo cotidiano?
Es cuando agradeces antes de que algo llegue.
Es elegir con conciencia en lugar de reaccionar desde el miedo.
Es tener paz en medio del caos porque sabes que estás guiado.
Es sonreír sin razón, porque algo dentro de ti te dice: “Todo está bien”.
Desde pequeños escuchamos: “el dinero no crece en los árboles”, “la vida es difícil”, “No se puede tener todo”.
Estas frases, repetidas y vividas, quedan como programación subconsciente. No se trata solo de lo que piensas, sino de lo que “vibra” en tus células.
Desde la neurociencia:
Tu cerebro activa las mismas redes neuronales cada vez que piensas “no puedo” o “es difícil”. Tu realidad se vuelve una repetición de tus patrones internos. Bruce Lipton lo llama “biología de la creencia”.
Ley de Atracción mal entendida:
No es “pensar positivo” solamente. Es ser coherente vibratoriamente. El universo responde a tu campo electromagnético (corazón + emoción), no solo al pensamiento racional.
La verdadera manifestación no ocurre cuando solo lo deseas o solo lo visualizas, sino cuando todo tu sistema – mente, corazón, cuerpo y energía – están alineados con lo que deseas recibir.
A eso le llamamos coherencia vibracional.
El alma manifiesta con facilidad cuando la vibración del deseo es amorosa y sincera, no forzada ni desde la carencia.
Los ángeles, guías o energías superiores actúan como amplificadores de nuestra vibración. Si estás en paz, gratitud y apertura… ellos pueden colaborar contigo en esa creación.
1.Mental: Ideas como “no hay suficiente”, “otros lo merecen más que yo”.
2.Emocional: Miedo al éxito, culpa por tener más, heridas de abandono o rechazo.
3.Energético: Frecuencia baja (tristeza, rabia, juicio), chakra raíz y plexo solar bloqueados.
1.Revisa tus pensamientos: ¿Estoy pensando en escasez o en gratitud?
2.Siente la emoción del deseo cumplido: ¡No esperes a que llegue para sentirla! Anticípala.
3.Actúa como si ya vivieras desde ese estado: decisiones, hábitos, límites.
4.Medita y respira desde el corazón: centra tu atención en el pecho, visualiza luz, siente gratitud real.
Declara en voz alta desde el ser: “Yo Soy abundancia”, “Estoy listo para recibir
Gratitud diaria.
Servicio con propósito.
Merecimiento profundo.
Autenticidad: ser tú mismo sin máscaras.
Relaciones nutritivas (de ida y vuelta).
EJERCICIOS PRÁCTICOS
MAPA DE ABUNDANCIA EMOCIONAL
“No se trata de lo que quieres tener, sino de cómo te quieres sentir”.
PROPÓSITO:
Experimentar emocionalmente como si ya estuviera viviendo en abundancia, su nuevo estado de plenitud, amor, fluidez y gratitud, accediendo a tu subconsciente mediante visualización, escritura, anclaje energético y programación verbal.